acogiendo mis emociones

Herramientas para acoger mis emociones

¿Cómo acoger mis emociones?

En estos tiempos difíciles, donde muchas veces lo que sentimos no es agradable, se hace necesario disponer de herramientas para acoger mis emociones. Permitirme sentirlas pero sin que se apoderen de mí o lleguen a hacerme perder el control o desestabilizarme. Es necesario sentirlas dentro de lo que llamamos la ventana de tolerancia, es decir, sin llegar a explotar, que sería estar por encima de mi ventana de tolerancia, o sin bloquearme, que también estaría fuera de mi ventana. Las emociones son necesarias, por lo que no se trata de que desaparezcan, sino de que podamos sentirlas sin desregularnos. En este artículo hablamos un poco más en profundidad sobre este tema. acogiendo mis emociones Respirar, ser consciente de dónde se está haciendo presente la emoción, en qué parte del cuerpo y después observarla sin dejarme arrastrar. Para ello las herramientas para acoger las emociones de la imagen nos pueden resultar muy útiles.
  • cuéntalo: habla con alguien sobre lo que te ocurre o sientes.
  • escribelo: puedes escribirte una carta a ti, o a tu yo futuro, o practica la escritura automática: escribe rápido lo que te surja sin tener que buscar un sentido entre las frases o palabras que aparezcan ante ti.
  • píntalo: dibuja, no seas crítico contigo, coge papel y lápiz y lo que surja, los dibujos abstractos y los garabatos también vienen muy bien para estabilizarnos.
  • llóralo: déjate sentir, sin juicio
  • respíralo: sostén la emoción, tal cuál viene. Conecta con ella.
  • suéltalo: elige la manera que mejor te venga a tí, puede ser gritar, correr, golpear un cojín….
No siempre hay que actuarlas, pero sí poder expresarlas. Pintando, llorando, escribiendo, hablando con alguien… o sostenerlas: conectando con la emoción, con su mensaje. Son herramientas que nos van a ayudar a regularnos, es decir, a ser capaces de sostener esa emoción sin perder el control. Quizá si te resulta muy difícil, si pierdes el control con facilidad y te cuesta volver a la calma, podrías necesitar ayuda para trabajar a un nivel más profundo. Ver qué hay detrás de esa rabia, de esa tristeza o de ese miedo. Quizá podría ser un buen momento para iniciar un proceso de terapia. Si lo deseas, podemos ayudarte. Ponte en contacto con nosotras.

Sonia Cantos y Montse Amo.

Psicólogas y Psicoterapeutas Humanistas

AGua Psicología 

Deja una respuesta

Suscríbete
a nuestro boletín